miércoles, 7 de noviembre de 2012

Structuralia mira hacia Perú y Colombia

La escuela de formación se plantea la expansión a otros mercados latinoamericanos después de afianzarse en Chile

La compañía española Structuralia, que forma parte de Kaplan -un gigante de talla mundial en el ámbito de la formación- inició su proceso de internacionalización a Latinoamérica en el año 2007. Especializada en el negocio de la formación online en castellano, al otro lado del Atlántico encontró un claro hueco para poder ampliar su ámbito de influencia. Chile, un mercado mucho más pequeño que el español pero con un nivel tecnológico bastante avanzado, se convirtió en la primera apuesta.

«Nuestro crecimiento era importante en España, de un 20% al año, y decidimos que era el momento de probar suerte en otro país», explica Andrés Serrano, director general de la compañía, que forma fundamentalmente a profesionales y empresas de los sectores energético y de la construcción. El perfil más abundante entre sus alumnos es el del ingeniero que quiere seguir formándose. «La acogida fue increíble. Nos lanzamos a abrir delegación en el año 2008 y desde el principio el crecimiento fue mayor al esperado», apunta, reconociendo que Structuralia seguirá afianzándose en este país.

AÑOS DE ÉXITO
Casi un lustro después de su llegada al mercado chileno, el balance resulta favorable. El interés por la formación de Structuralia ha crecido en aquel país a buen ritmo y ya supone el 8% del negocio total de la compañía, que cuenta con más de cincuenta trabajadores en la actualidad. Serrano explica además que gracias a la delegación chilena, en la que trabajan cinco personas, ha comenzado a formar a profesionales y empresas latinoamericanos de otros países. «Es la ventaja de la formación online, que permite seguir los cursos de minería o ingeniería sísmica o de otra rama desde el punto geográfico que el cliente elija», corrobora el director de la empresa.

La positiva experiencia chilena ha animado a Structuralia a pensar en otros mercados. Ahora mismo, la empresa está diseñando un «ambicioso» plan de crecimiento para los próximos años, y en él tendrán cabida países «que están creciendo muy por encima de lo que lo hacen los países europeos».  Serrano cita el caso de Perú, Colombia e incluso México, donde además está previsto que siga aumentando la inversión pública en infraestreucturas. «Son mercados donde hay que formar a ingenieros, y donde hay mucho que progresar en los ámbitos de gestión y especialización», razona Serrano.
El éxito de Structuralia se apoya en la calidad de los formadores. Hoy por hoy, cuenta con  destacados expertos del mundo de la ingeniería como José Llorca, actual Presidente de Puertos del Estado; Fernando Gutiérrez de Vera, máximo responsable del proyecto ferroviario Medina–La Meca que van a diseñar y ejecutar un grupo de empresas españolas y saudíes; Mateo Rodríguez, antiguo director general de Dragados Industrial; Jaime Álvarez López, ex residente de Urbaser; o Gonzalo San Cristóbal, ex presidente de OHL Industrial.

Gracias a ellos y a sus acuerdos con la Comisión Europea o la Organización de Estados Americanos, Structuralia forma a unos 20.000 alumnos al año, de los que en torno a 1.000 son de algún país de Latinoamérica.

jueves, 25 de octubre de 2012

Los bienes de equipo, ante su mejor momento

España se beneficia del impulso brasileño a la inversión en renovar equipos y ampliar su capacidad industrial

Jose Luis B. Benayas
Madrid

Una moneda, el real, en buena forma; un crecimiento moderado pero constante; una imagen, por lo general, positiva de España; y una apuesta decidida de Gobierno y empresas por invertir en la renovación de equipos y en la ampliación de la capacidad productiva, especialmente en el ámbito industrial y a través de nuevas infraestructuras... Todos esos detalles conforman una oportunidad de oro para la exportación española de bienes de equipo.

En realidad, parte del camino ya está hecho. Desde hace unos años, España exporta a Brasil sobre todo bienes de equipo y semifacturas y, cada vez en menor medida, bienes del sector automóvil. Esta tendencia ya era descrita en el año 2009 por un estudio -coordinado por el profesor de Icade Alfredo Arahuetes- sobre el entorno económico y las oportunidades de inversión en Brasil. Partiendo de las premisas anteriormente citadas, el estudio hacía hincapié en que las mejores perspectivas exportadoras eran para material de transporte (partes y componentes para aviación), maquinaría específica para los diferentres tipos de industria, equipos para telecomunicaciones y equipos informáticos.

Sin embargo, la capacidad de aumentar la cuota exportadora es mucho mayor. Primero, porque España cuenta con empresas de primera línea en el ámbito de los bienes de equipo -muchas de ellas agrupadas bajo el paraguas de la Asociación Nacional de Fabricantes de Bienes de Equipo (Sercobe), con una facturación conjunta de casi 40.000 millones de euros anuales-. Segundo, porque esas mismas empresas llevan años orientando su negocio a la exportación. Según los datos del Ministerio de Economía, el de los bienes de equipo es el sector más exportador, con más de 43.000 millones sólo en el año 2013. Y tercero, por el mayor interés de Brasil por importar productos en este área.

Ese mayor interés lo ha demostrado recientemente la Cámara de Comercio Exterior (Camex) de Brasil, al aprobar la reducción del impuesto que grava la importación de cerca de 300 tipos de bienes de equipo  y artículos del sector de informática y telecomunicaciones que no son producidos en el país.
Según datos de la Oficina Económica y Comercial de España en Sao Paulo, el impuesto se sitúa en el 2% hasta el próximo 31 de diciembre del año 2013, cuando el tipo original estaba fijado entre el 14% y el 16%. La industria brasileña desembolsará a medio plazo algo más de 500 millones de euros  en la importación de dichos productos, cantidad que será utilizada en diferentes proyectos que suponen una inversión conjunta de más de 1.700 millones de euros.

miércoles, 25 de julio de 2012

"México y su futuro postelectoral"

Tribuna de opinión de Carlos Malamud
Investigador principal para América Latina 
del Real Instituto Elcano

El calendario postelectoral mexicano es muy prolongado. El 1 de julio, cada seis años, hay elecciones presidenciales, aunque el nuevo gobierno asume el 1 de diciembre. Los resultados definitivos, parlamentarios incluidos, se conocen a fin de agosto. Estos plazos no son importantes en circunstancias normales, pero suman incertidumbre cuando algún actor protagónico cuestiona el proceso.

Ocurrió en 2006 y podría repetirse ahora. En ambas ocasiones el candidato del PRD (Partido de la Revolución Democrática), Andrés Manuel López Obrador, denunció los resultados en base a supuestas irregularidades. En 2006 fue favorecido por la sorpresa y porque sólo lo separaba medio punto del presidente, Felipe Calderón. Hoy, la distancia con Enrique Peña Nieto, el candidato del PRI (Partido Revolucionario Institucional), es de casi siete puntos y tres millones de votos.

Para justificarse insiste en que se violaron los principios de certeza, imparcialidad, equidad, objetividad y profesionalismo, ya que hubo compra y coacción del voto, intervención ilegal de los gobernadores del PRI,
manipulación de las encuestas e inacción del Instituto Federal Electoral (IFE) en la fiscalización de los gastos del PRI. Por eso habla de la compra de cinco millones de votos, una cifra que anularía a su rival.

Los resultados de las elecciones parlamentarias muestran que la ventaja del PRI y partidos aliados es mayor, pese a no tener la mayoría absoluta en el Congreso ni en el Senado. Si bien el PRI se habría quedado muy
cerca del 51% de los escaños en ambas cámaras, un dato que sólo se conocerá a fines de agosto, la necesidad de impulsar un profundo programa de reformas requiere de alianzas muy claras, especialmente con el PAN (Partido de Acción Nacional).

Entre las reformas más importantes están la energética (haciendo de PEMEX una empresa eficiente y rentable), la fiscal, la política o la del sistema educativo y de justicia. México y su futuro postelectoral.
La mayoría de ellas necesita reformas constitucionales, sólo posibles con los dos tercios en el Congreso y el Senado y para ello hay que sumar al PRI y al PAN. Únicamente con esta agenda reformista México podría evitar la trampa que acecha a los países de renta media y que impide su consolidación como naciones
desarrolladas.

El otro tema central del nuevo gobierno es la lucha contra el narcotráfico, devenida en guerra abierta con Calderón. Su evolución y sus más de 50.000 víctimas importan por varias razones. Primero, por su impacto en la opinión pública nacional, preocupada de forma ambivalente por el nivel de violencia y por la inseguridad y las amenazas de los carteles de la droga. Segundo, porque afecta la relación estratégica con EE.UU., clave para sus intereses. México es su tercer socio comercial, tras Canadá y China, e importa 200.000 millones de dólares anuales. Si sumamos los 3.185 kilómetros de frontera común y el peso de la colonia mexicana se entiende la importancia de la relación. En 2009, los más de 31 millones de mexicanos y sus descendientes eran el 10,3% de la población de EE.UU.

Peña Nieto tiene escaso margen para realizar cambios bruscos en la política contra el narcotráfico. Intentará desdramatizar el impacto de la guerra, buscando algunos triunfos rápidos y espectaculares y reduciendo el número de víctimas. Pero necesita el respaldo de Washington. De ahí sus palabras conciliadoras hacia el
norte. Tranquilizar al vecino para negociar más con él es un factor clave para mantener el crecimiento, estimado para 2012 en el entorno del 4%.

lunes, 23 de julio de 2012

El reto de construir un nuevo México en 30 años

El país debe abordar profundas reformas para dejar el vagón de cola de los grandes emergentes

Tras la crisis de deuda del año 1982, la economía mexicana inició un largo periodo de prosperidad que a día de hoy le ha convertido en una de las economías emergentes de mayor entidad en el mundo. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Su crecimiento medio anual se sitúa en el 2,8% del PIB, muy lejos de la capacidad mostrada por otras economías en desarrollo, tanto de América Latina como de Asia. La clase media no avanza. Y la renta per cápita ronda los 15.000 dólares anuales. El país ha caído en la llamada 'trampa de la renta media'.

Pero México tiene potencial. Segunda economía en cuanto a tamaño en Latinoamérica tras Brasil, podría multiplicar su PIB hasta los 7,5 billones de dólares, y el poder adquisitivo de sus ciudadanos podría llegar a ser similar al de los franceses.Al menos así lo piensan una gran cantidad de expertos y economistas, que para aventurar un futuro así de próspero tienen en cuenta el tamaño de la economía mexicana, su población, su situación estratégica en el mapa y su grado de aperturismo económico, entre otros factores. Sin embargo, ese progreso posible depende de un aspecto de enorme trascendencia: un paquete reformista que a lo largo de los próximos treinta años ‘toque’ a las propias instituciones, a la educación, a la investigación, al modelo ‘federal’ del país y a la forma de entender el gasto público. Unas reformas que, de no llevarse a cabo, dejarán a México en el vagón de cola de los países emergentes.

Más allá de la política
Semanas antes de las elecciones mexicanas, en las que obtuvo la victoria el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, fue presentado el libro Futuro para todos, acciones inmediatas para México. Coordinado por los economistas Claudio Loser y Harinder Kohli, lleva el sello del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp) y de Centennial Group. El documento señala el camino a seguir para lograr un futuro próspero.

En concreto, el punto de partida es un país que, si bien es cierto que goza de una cierta estabilidad económica, altas reservas internacionales y un aceptable nivel de inversión extranjera, no ha sabido desarrollar nuevas capacidades tecnológicas, un buen capital humano y unas instituciones lo suficientemente fuertes como para producir productos más sofisticados. Un país que ya no puede competir en costes con otros de menor desarrollo, ni tampoco en alta tecnología con los más desarrollados.

Futuro para todos, acciones inmediatas para México propone más de una treintena de reformas que le permitirían colocarse con un PIB per cápita de 50.000 dólares. «De no seguir este camino, esa renta sólo avanzaría hasta 30.000 dólares en treinta años», manifestaba Claudio Loser, fundador de Centennial Group América Latina, a lo largo de la presentación del libro. Ese paquete reformista, defienden los que han elaborado el documento, va mucho más allá de ideologías políticas y requiere de un gran quórum entre fuerzas políticas, porque en el fondo supone una vuelta de tuerca a la actual estructura política, económica, social y cultural del país.

En todos los ámbitos
La primera de esas reformas tiene que ver con el ámbito de la educación. México ocupa, hoy por hoy, el puesto 66 en el ranking mundial de calidad educativa (según el Informe de Competitividad Global del año 2011). Sólo uno de cada seis mexicanos cuentan con un título universitario. A la vez, sólo hay una universidad del país entre las 200 más prestigiosas del mundo. Y por si fuera poco, la inversión en I+D apenas alcanza el 0,5% del PIB. Por eso, los expertos creen que la inversión debe estar mejor distribuida para garantizar la inclusión de todas las clases sociales. A su vez, se debe prestar más atención a la educación superior, con especial énfasis en las ciencias aplicadas incluyendo la ingeniería, y apostar por un ámbito educativo que promueva el emprendimiento y la innovación.

Para construir una economía competitiva, Centennial Group considera necesario también invertir mucho más dinero en infraestructuras, pasando del 2% del PIB actual al 3,5%. Hoy, México ocupa el puesto 69 a escala mundial en el ranking que elabora el Foro Económico Mundial en cuanto a la calidad de las mismas. Esa mayor inversión, complementada «con la colaboración del sector privado», debe incluir un refuerzo de las infraestructuras en el ámbito de las TIC y de la energía.

El sector financiero mexicano sigue siendo pequeño y concentrado: sólo siete bancos controlan más del 80% del mercado. Por eso, los expertos abogan por más intermediación financiera y por la apertura del sector, para fomentar la competencia y ofrecer un mejor servicio a segmentos como el de las pyme.
Respecto al clima de negocios, Cenntenial Group considera necesario terminar con algunos monopolios públicos (como el de Pemex o el de la Comisión Federal de la Electricidad) y privados, favoreciendo más la libre competencia. A la vez, las instituciones deberán volcarse en eliminar la informalidad, la corrupción e incluso el crimen, pues el clima de violencia, que ha vuelto a repuntar, en nada favorece a la actividad económica.

Futuro para todos, acciones inmediatas para México también cree necesarias más privatizaciones, una reforma fiscal ambiciosa, otra   más  -quizá la de mayor envergadura- para garantizar el buen gobierno tanto de la Administración Central como de los Estados federados, y otra para combatir la economía sumergida.
Por último, el libro anima a perseguir una política a favor de la igualdad y la inclusión , y un mayor grado de aperturismo de la economía de México a regiones como la asiática.
«Si este documento se tiene en cuenta, México pasará a ser un país de oportunidades y prosperidad», concluye Claudio Loser. Un claro mensaje para un momento de 'impass' político en el que las Cámaras van a proceder a renovarse.

viernes, 6 de julio de 2012

Entrevista con el ministro de Comercio, Industria y Turismo de Colombia

Sergio D. Granados: "A Colombia ya se nos ve como un buen país para invertir"

Colombia fue durante el año pasado el tercer receptor de inversiones de América Latina. Lo asegura Sergio Díaz Granados, ministro de Comercio, Industria y Turismo de este país, que quiere seguir ganando peso en el mundo y conservar el atractivo para el inversor internacional. «Importantes empresas españolas están presentes en Colombia desde hace dos décadas, pero queremos que esta relación aumente», afirma. Razón ésta de su reciente visita a España, que también aprovechó para 'vender' Colombia como destino turístico sostenible.
M.A./ Madrid

¿Qué oportunidades ofrece Colombia a los inversores españoles?
Hasta ahora España es el segundo inversor extranjero más importante en nuestro país y el tercero que más empleo genera en Colombia. Si me habla de oportunidades, pienso que las más importantes se abren en en el ámbito de las infraestructuras y en vivienda. Por una parte, Colombia invertirá 50.000 millones de dólares en infraestructuras durante los próximos años, y por la otra, España es muy fuerte en la construcción de carreteras, puertos... Por eso estoy seguro de que las empresas españolas irán a Colombia a aprovechar estas oportunidades.

¿Y en otros sectores?
También se está abriendo un gran abanico en el sector del turismo, donde empresas hoteleras importantes como NH, Meliá o Iberostar están apostando fuerte. También en el ámbito de los cruceros. Empresas españolas están tomando Cartagena de Indias como puerto de embarque.

Pero todo es susceptible de ser mejorado. ¿Cómo podría aumentar la relación comercial entre ambos países?
Lo que falta es una relación más fuerte entre las pymes españolas y colombianas. A la pequeña empresa, por ejemplo, le cuesta salir al exterior, un aspecto que cada día cobra más relevancia. Pienso que las pymes españolas y colombianas deberían unir lazos para salir de la mano al mercado internacional.

¿Cómo conseguirlo?
Tanto en el Gobierno colombiano como en el mundo de la empresa somos conscientes de que debemos ganar más peso en el mundo. Por eso estamos trabajando en acuerdos comerciales con Estados Unidos, Corea, Europa, y dentro de ésta, por supuesto con España.

¿ Cree que seguirá creciendo en Colombia  la presencia de empresas españolas en los próximos años?
Estoy seguro de que sí. Muchas empresas ya nos están viendo como una oportunidad para invertir. Por nuestra parte, también estamos trabajando para convertirnos en un destino más seguro, tanto jurídica como físicamente.

Lee la entrevista completa en la edición papel de Dossier Empresarial. Cada viernes, en tu quiosco.

viernes, 25 de mayo de 2012

América Latina busca más inversión en energía

La abundancia de recursos naturales contrasta con el  escaso desarrollo del sector. El capital privado, posible solución.

América Latina y el Caribe constituye una región rica en recursos energéticos como hidrocarburos, energía hidroeléctrica o biocombustibles. Pero esta riqueza está desigualmente distribuida. Aproximadamente 40 millones de personas, según las estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), carecen de acceso a los servicios modernos de electricidad, y las importaciones de combustible consumen un porcentaje cada vez mayor de los presupuestos de los países más pequeños.

Los indicadores arrojan cifras crecientes de demanda de energía, respaldadas en un mayor consumo en las empresas y por parte de amplios segmentos de la población, que van saliendo de la pobreza para incorporarse a la clase media. Esa demanda en aumento está incentivando nuevas inversiones para expandir la capacidad de los sistemas energéticos y eléctricos  y dotarlos de mayor seguridad y eficiencia (otro área en el que hay mucho camino que recorrer).

Al margen, la explotación de nuevas fuentes de energía (más allá de la hidroeléctrica o la geotérmica, que copan gran parte de la producción hasta el momento) abre las posibilidades del futuro inversor. El terreno de las energías renovables es el más apetecible, tal y como ponen de relieve el propio BID y la consultora Bloomberg New Energy Finance en su Climascopio. Este informe pone de relieve que en 2011 los inversores destinaron cerca de 260.000 millones de dólares a financiar proyectos y tecnologías de energía eólica y solar, biocombustible, eficiencia energética y otras tecnologías y proyectos de energía limpia en todo el mundo. Y sólo 10.000 millones se destinaron a Latinoamérica, cifrra que el BID considera como «muy insuficiente».  ¿Por qué? Porque, entre otros aspectos, se considera que la región puede aportar más de 8.000 megavatios (MW) de nueva capacidad eólica durante los próximos tres años, y  los países de

América Central «están en condiciones de añadir 130 MW de energía geotérmica».
Otras fuentes de energía, como la nuclear (que constiuye el 3% de la energía eléctrica en Latinoamérica) también podrían ofrecer oportunidades, pero más a largo plazo. La indefinición de los países tras la crisis japonesa de Fukushima ha ralentizado planes de construcción de nuevas centrales en países como Brasil, México y Argentina. Sin embargo, basta recordar que Brasil es el sexto productor de uranio del mundo para entender que esa indefinición podría no ser eterna.

miércoles, 23 de mayo de 2012

¿Nube pasajera o tormenta perfecta?

Tribuna de opinión en Dossier Eurolatam
Carlos Malamud
Investigador principal para América Latina del Real Instituto Elcano

En menos de un mes dos expropiaciones o nacionalizaciones de empresas españolas en América Latina saltaron todas las alarmas. Así, surgieron numerosas voces que auguraban movimientos similares en otros países de la región contra intereses españoles. Entre los argumentos manejados: la crisis española, la debilidad de la Marca España o una política inadecuada para América Latina.

Tras la expropiación del 51% de las acciones de YPF en manos de Repsol o la nacionalización de la Transportadora de Electricidad (TDE), en Bolivia, cuyo 99% pertenecía a Red Eléctrica Española, cabe preguntarse si asistiremos a un efecto dominó. Los temores a la réplica de conductas similares en otros países de la región son totalmente legítimos.

Si atendemos a la coyuntura política y económica latinoamericana podremos extraer algunas conclusiones útiles, que mejorarán el diagnóstico y ayudarán en la toma de decisiones. Como mostró el último informe de la CEPAL (Comisión Económica de Naciones Unidas para América Latina), la inversión extranjera directa (IED), que alcanzó la cifra récord en 2011 de 153 mil millones de dólares, ha mostrado una región fragmentada. Desde el punto de vista de los inversionistas externos, no existe una única realidad regional y éstos apuestan por uno u otro destino en función de la seguridad jurídica existente en cada país, de la mayor o menor previsibilidad del sistema político y del comportamiento racional de los actores implicados.
Como dijo el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, en presencia de Mariano Rajoy y en alusión directa a YPF, «nosotros no expropiamos». Por eso existen algunos países, encabezados por Brasil, México, Chile, Colombia y Perú, a los que también se pueden sumar Costa Rica, Panamá, República Dominicana o Uruguay, donde el riesgo de nacionalizaciones es prácticamente cero o casi mínimo y en el hipotético caso que ocurran estarán rodeados de las mayores garantías.

La nota más insólita del pasado 1 de mayo, cuando Evo Morales anunció en La Paz la nacionalización de TDE, fue que en la tarde del mismo día el propio Morales, acompañado del presidente de Repsol, Antonio Brufau, inauguró una instalación gasista que permitirá exportar mayores cantidades de gas al deficitario mercado argentino. ¿Es posible que por la mañana se nacionalice una empresa española y por la tarde se ensalce a otra? En realidad, desde que en el año 2006 se nacionalizaron los hidrocarburos este tipo de medidas se han hecho 'normales' en Bolivia, afectando a empresas de distintas nacionalidades y no sólo españolas.

Más importante, y esto también vale para Ecuador y Venezuela, e incluso Cuba, en estos países las empresas extranjeras que ya habían sido expropiadas o corrían el riesgo de serlo, tras arduas negociaciones llegaron a acuerdos con los respectivos gobiernos. Estos acuerdos, centrados en el sector energético, limitan los riesgos de expropiación, aunque obviamente no los eliminan totalmente.

Es obvio que no se pueden excluir nuevos acontecimientos similares, pero tampoco se puede pensar en una tormenta perfecta que arrase con los intereses españoles en América Latina. La realidad debe analizarse por países y por ramos de actividad. No hay respuestas generales válidas como tampoco un efecto dominó ni una ofensiva contra España. Desde aquí corresponde adoptar una actitud más racional y menos pasional, sin caer en teorías conspirativas y pensando adecuadamente las mejores respuestas, tanto desde una perspectiva empresarial como gubernamental.

lunes, 21 de mayo de 2012

Integración regional en Latinoamérica

Joaquim Tres y Ramiro Pascual, del BID, analizan el proceso de integración regional y el impulso que éste recibiría de resolverse algunos cuellos de botella en el sector de infraestructuras. Muy interesante artículo en: http://www.ribei.org/index.php/esl/PUBLICACIONES/La-integracion-regional-y-global-emergente-de-America-Latina-y-el-Caribe-1

viernes, 18 de mayo de 2012

Infraestructuras, el lastre al crecimiento de América Latina


El déficit de infraestructuras en buena parte de los países latinoamericanos impide conseguir más competitividad y complica el futuro de algunas de estas economías

Mientras Europa y EE.UU. aún convalecen por la crisis, América Latina logró en 2011 un crecimiento del 4,3% según los datos del Banco Interamericano de Desarrollo, en línea con los avances del PIB previstos para la región a corto y medio plazo. Sin embargo, una amenaza se cierne sobre ese desarrollo: el déficit de infraestructuras.
Ya lo advertía recientemente la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE). «Las infraestructuras son un importante cuello de botella para la sostenibilidad del crecimiento, la competitividad e incluso la equidad en América Latina. La región presenta brechas elevadas no sólo con respecto a los países de la OCDE, sino también a economías emergentes de Asia y otras regiones del mundo». Es cierto que en las últimas décadas la dotación de infraestructuras de Latinoamérica ha mejorado ligeramente, pero menos de lo debido. Eso ha incidido de manera preocupante en la productividad y constituye una amenaza muy seria para el futuro.
En sus informes, el Banco Mundial también analiza el retraso latinoamericano en obras de gran calado.  Existe una dependencia exacerbada del transporte por carretera, y eso sucede cuando la mitad de las vías está sin pavimentar. El transporte ferroviario presenta peor situación aún: un  informe de Solchaga Recio & Asociados recuerda que el volumen de transporte a través de este medio se ha reducido desde  1990. Entonces, la región superaba el promedio global en pasajeros por kilómetro y desde entonces ha caído a la mitad. Con el transporte aéreo las cosas no van mucho mejor. Se ha incrementado más de un 200% el número de pasajeros y de toneladas de carga, pero los aeródromos conviven  con deficientes sistemas logísticos, una reglamentación inapropiada y un desarrollo escaso de los servicios. Con los puertos, a excepción de los chilenos, sucede lo mismo.
¿Y a qué se debe este déficit? El esfuerzo inversor siempre ha sido insuficiente. El sector público ha pasado de invertir aproximadamente el 3% del PIB a este capítulo en los años '90 a no destinar, como media, más del 1% ahora. Eso se ha debido de forma fundamental a un mayor control sobre las finanzas públicas, fruto de las crisis de los '80, y siempre con el elevado nivel de endeudamiento como grandes fantasmas.  El peso inversor público ha destacado más en países como Chile y Brasil.
El sector privado, mientras, sí ha incrementado posiciones, y ahora destina también a infraestructuras en torno al 1% del PIB, sobre todo gracias a su aportación en países como México y Colombia. Pero, ¿por qué no ha tenido una mayor participación? La OCDE, en su informe Perspectivas Económicas de América Latina 2012, apunta numerosas razones: el poco rigor en las fases de proyectos de inversión; un sesgo político favorable a nuevas obras y no al mantenimiento; problemas de regulación de las concesiones (reparto ineficiente de riesgos o renegociaciones oportunistas); o gestión poco eficaz de las empresas públicas..
Hay una cosa clara: invertir en obra pública favorece la competitividad, y una apuesta en este ámbito en Latinoamérica incidirá en mayor crecimiento del PIB. BBVA Research cree que el coste de oportunidad de no invertir en esta área representará una pérdida equivalente al 66,5%  del PIB en promedio en Chile, Perú, México y Colombia.
Dado que el sector público ha de vivir pendiente del buen estado de sus cuentas (el ejemplo europeo cunde), las infraestructuras suponen una gran oportunidad para la empresa privada. Ahora todo depende de su valentía (algunas compañías españolas como OHL, Acciona, Sacyr o ACS ya la han demostrado) y de la pericia de los gobiernos latinos  para modernizar su legislación y captar y canalizar con acierto la inversión exterior. 

jueves, 17 de mayo de 2012

¿Más expropiaciones?

Tras las expropiaciones de YPF por parte del Gobierno argentino y de Red Eléctrica en Bolivia, las suspicacias en el mundo empresarial español todavía no se han calmado.
A la pregunta de si cree que habrá más expropiaciones de empresas españolas en Latinoamérica, los lectores de Dossier Eurolatam opinan que sí, en un 66%. Significativamente, el conjunto de este 66% se decanta hacia el sector de las telecomunicaciones al señalar la actividad que estaría a su juicio bajo más presión en estos momentos.

Mañana viernes, nueva entrega de Dossier Eurolatam en Dossier Empresarial: las infraestructuras como cuello de botella del crecimiento en América Latina; Colombia como nuevo foco de atracción para los inversores españoles; y la tribuna de opinión de Carlos Malamud, responsable de Latinoamérica en el Real Instituto Elcano.

En tus quioscos, en www.dossierempresarial.com y en www.dossiereurolatam.blogspot.com

miércoles, 9 de mayo de 2012

Colaboración empresarial entre Castilla y León y Colombia

Colombia está de moda. Un aluvión de informes y estudios sobre la economía colombiana ha aparecido en España, especialmente tras la celebración el pasado mes de abril de la VI Cumbre de las Américas en Cartagena de Indias. Y también significativamente, tras las expropiaciones de YPF en Argentina y de Red Eléctrica en Bolivia. Los empresarios españoles viran hacia otros destinos latinoamericanos y son mucho más selectivos a la hora de aterrizar en el continente.
(Ver el post del pasado 20 de abril: "España se vuelve selectiva en sus inversiones en Latinoamérica": http://dossiereurolatam.blogspot.com.es/2012/04/espana-se-vuelve-selectiva-con-su.html).

Los últimos en apostar por Colombia han sido los empresarios castellanoleoneses. Cecale, la patronal de referencia en Castilla y León, ha firmado un convenio de colaboración con la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia en la capital colombiana.

Hasta Bogotá se desplazó el presidente de Cecale -también máximo responsable de Cepyme-, Jesús María Terciado para rubricar el intercambio de información en materia de innovación y de transferencia del conocimiento, la organización de encuentros empresariales y el impulso de inversiones públicas e infrastructuras que mejoren la competitividad de las empresas de ambas regiones.


miércoles, 2 de mayo de 2012

Y ahora, Bolivia

El Gobierno boliviano, presidido por Evo Morales, ha seguido los pasos de su homóloga argentina Cristina Fernández, y ha expropiado la filial boliviana de Red Eléctrica (por cierto, con un 20% de participación estatal a través de la SEPI).

A pesar de que Morales ha asegurado que compensará económicamente a la empresa española por la nacionalización y las inversiones realizadas en el país, lo cierto es que este nuevo ataque a los intereses españoles en Latinoamérica empieza a ser preocupante. El ministro de Economía, Luis de Guindos, insiste en que la nacionalización en Bolivia no es comparable, ni por peso económico ni por el proceso, con la expropiación de YPF llevada a cabo por el Gobierno argentino hace apenas un par de semanas. Pero las alarmas se han disparado.

En una reciente encuesta realizada por DOSSIER EUROLATAM en la que se preguntaba a nuestros lectores si creían que Argentina expropiaría alguna empresa española más, el 66% de los participantes se inclinaban por el 'no'; el 16% creía que sufriría algún ataque una empresa financiera; y otro 16%, pensaba que estaría en peligro alguna empresa española de telecomunicaciones.

Ahora, tras la nacionalización en Bolivia, abrimos nueva encuesta para pulsar si se ha producido un cambio de sensación.

viernes, 20 de abril de 2012

Una relación muy especial


Carlos Malamud  
(Investigador principal para América Latina 
del Real Instituto Elcano)

Se afirma frecuentemente que las relaciones entre España y América Latina, en ambas direcciones, son muy especiales y que ello descansa en la existencia de una historia, una tradición cultural, una lengua (no del todo cierto para Brasil) y una religión comunes. Estas bases permitirían explicar la fortaleza de unos vínculos que han trascendido en el tiempo y se observan en las numerosas asociaciones iberoamericanas de todo tipo que han florecido en las últimas décadas.

Sin embargo, las cosas no son tan rosas como aparentan y las visiones de la relación difieren a ambos lados del Atlántico. Cada uno cuenta la historia como la ha vivido o como se la han contado. A esto se suma que las percepciones del «otro» no son homogéneas en todos los países. Esto último se relaciona con la pertenencia de América Latina a Occidente y a la cultura occidental. Como dijo Alain Rouquié, América Latina es el extremo occidente, pero occidente al fin de cuentas. Por eso, mientras hay grupos étnicos, políticos y sociales que se muestran orgullosos de sus identidades nacionales, hay otros que reniegan de estos vínculos e insisten en su ascendencia vernácula, un tema que impacta fuertemente en la imagen que se tiene de España y sus empresas.

El impulso dado en los últimos tiempos a los «pueblos originarios», fórmula políticamente correcta, aunque no históricamente correcta, de referirse a los indígenas así lo prueba. En esto destaca claramente la Bolivia de Evo Morales, pero se pueden encontrar reflejos similares en Perú, Ecuador, Guatemala o México, los países con mayor presencia indígena. De ahí la necesidad de conocer el entorno en el que se quiere operar y cuáles son sus características más importantes, desde el punto de vista político, legal y económico.

A los factores señalados hay que agregar, en las últimas dos décadas, una presencia empresarial de España hasta entonces desconocida por su volumen, pujanza y vitalidad. No es que previamente no hubiera inversiones españolas en la región, o no hubiera hombres de negocios españoles, pero hay que recordar que la internacionalización de la gran empresa española es un fenómeno reciente. Precisamente, el proceso comenzó en América Latina, intentando beneficiarse de la ventaja competitiva del idioma y las costumbres.

La mejor manera de aprovechar las oportunidades actualmente existentes en América Latina, que atraviesa una coyuntura económica más saneada y con mejores expectativas que España, es aproximarse a ella sin prejuicios y pensando que se trata de una relación de ida y vuelta. Y así como hay empresas españolas que buscan negocios en América Latina hay latinoamericanas que los buscan en España.

Generalizar sobre América Latina es difícil. No es lo mismo Brasil que Honduras o México que Paraguay, por poner sólo dos ejemplos. Por eso hay que profundizar en las diferencias. De hecho, los empresarios españoles ya no hablan de América Latina sino de países determinados. Según ellos, tanto da si son grandes empresas o PYMEs, hay un grupo de países encabezados por México y Brasil, donde también están Chile, Colombia y Perú, que atraen el mayor interés. Este grupo se completa con Panamá, Uruguay y República Dominicana. Por el contrario, hay otros que provocan mayor rechazo, bien por su inestabilidad política o por la falta de seguridad jurídica. De ahí que valga la pena insistir en la necesidad de adónde se quiere ir, para hacer qué y en qué condiciones. Conocerlo con antelación es el comienzo del éxito.

España se vuelve selectiva con su inversión en Latinoamérica

Ya no vale decir que España invierte en Latinoamérica, así, de forma genérica. Habrá que empezar a acostumbrarse a especificar en qué países latinoamericanos fija su mirada la empresa española. Especialmente tras el episodio de YPF en Argentina. Pero antes de la polémica decisión del Gobierno argentino, las compañías españolas (grandes empresas pero también pymes) ya se habían decantado por mercados muy concretos. Así, Brasil, México, Chile, Colombia y Perú se erigen como destinos preferentes para las empresas de nuestro país.

Brasil ha sido destinatario de más de 41.000 millones de euros de inversión española desde 1993, según datos del Ministerio de Industria. Es el 32% del total de la inversión de nuestro país en Latinoamérica. Argentina sigue siendo, por el momento, el segundo mercado destinatario de las inversiones españolas, con un stock acumulado desde los años '90 de unos 28.700 millones. Y México se erige como el tercer destino: más de 25.000 millones acumulados.

Otros mercados van creciendo poco a poco y en el futuro superarán sin duda a Argentina: Chile (10.000 millones de euros acumulados); Perú (con 3.500 millones, España es el principal inversor en el país andino); y Colombia (todavía con poca inversión. Algo que sin duda cambiará como demuestra la reciente visita del presidente del Gobierno a este país).

Grandes en inversión...pequeños en exportación

La relación entre España y Latinoamérica tiene, además de mercados preferidos, otra característica: la inversión prima muy por encima de la exportación. De hecho, solo EE.UU. nos supera en inversión en la región. Las empresas españolas han invertido más de 120.000 millones de euros en Latinoamérica, especialmente desde 1986 con la entrada de España en la UE.

En cambio, y aunque las exportaciones españolas a Latinoamérica han empezado a adquirir vigor a partir del estallido de la crisis económica, España todavía exporta más a Portugal que a toda América Latina. Los motivos son diversos pero sobre todo pesa el tipo de sectores que tradicionalmente han mirado hacia los países latinoamericanos. Los servicios han copado las relaciones comerciales entre España y esa región, de modo que era más fácil invertir (instalarse allí) que exportar productos. Ahora, empiezan a abrirse camino otros sectores como los tecnológicos.

Tampoco ayuda la lejanía (las empresas españolas miran abrumadoramente hacia Europa) o el poco valor añadido que tradicionalmente han tenido los productos fabricados en España, algo que está cambiando y que podría aportar know how a Latinoamérica.

jueves, 19 de abril de 2012

México y Colombia cortejan a España

La nacionalización de YPF, filial de Repsol, por parte del Gobierno argentino ha desatado una cierta inquietud entre otros gobiernos latinoamericanos, que ven como la seguridad jurídica en la región (tan arduamente trabajada) está siendo puesta en tela de juicio. Los presidentes de México, Felipe Calderón, y de Colombia, Juan Manuel Santos, han sido los más explícitos al respecto. Justamente aprovechando el viaje del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a Latinoamérica, tanto Calderón como Santos han asegurado que en sus respectivos países la seguridad jurídica está garantizada.
Calderón ha cogido al vuelo la coincidencia de la visita de Rajoy (programada con antelación al conflicto desatado entre Argentina y Repsol) y la expropiación de YPF para intentar atraer inversiones españolas en México. Y Santos no se ha quedado atrás asegurando que "aquí no expropiamos. Aquí lo que queremos es que ustedes sientan que hay reglas estables de juego, que no vamos a cambiar estas reglas, que aquí no vamos a expropiar".

Sanciones españolas
Mientras, el Gobierno español prepara una batería de medidas sancionadoras contra Argentina que, probablemente, serán aprobadas en el Consejo de Ministros de mañana viernes. España, al ser miembro de la UE, no puede romper unilateralmente el comercio con el país latinoamericano pero sí que puede restringir parte de sus importaciones. Y en el punto de mira se encuentran la soja y los biocombustibles.
De momento, la UE ha incluido el 'caso YPF' en el orden del día del Consejo de Ministros de Exteriores que se celebra el próximo lunes, 23 de abril. La intención de España es recabar el mayor número de apoyos europeos para poder elevar una queja formal ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).

martes, 17 de abril de 2012

El Gobierno argentino nacionaliza el 51% de YPF

Después de varios días de rumores, la amenaza del Gobierno argentino se ha cumplido: ha expropiado el 51% de YPF, propiedad hasta ahora de la española Repsol. En una decisión sin precedentes, y que rompe la seguridad jurídica en Argentina, la presidenta del país latinoamericano, Cristina Fernández de Kirchner, ha anunciado la privatización de la filial de Repsol. De hecho, funcionarios argentinos han procedido al desalojo de la sede principal de YPF esta misma tarde.

La presidenta argentina ha justificado la decisión por lo que según ella ha sido una "reiterada" falta de inversión por parte de Repsol, incumpliendo su compromiso con el Gobierno argentino. Un extremo que los responsables de la compañía española siempre han negado. El propio presidente de Repsol, Antoni Brufau, se desplazó la semana pasada a Buenos Aires para intentar reunirse con la presidenta. Cristina Fernández no llegó a recibirle.

Según Fernández, Argentina "es el único país de América y casi del mundo que no maneja sus recursos naturales". Y asegura que durante 2010, el país se vio obligado a importar combustible por valor de 10.000 mllones de euros.

Cómo va a afectar esta decisión a las relaciones diplomáticas entre España y Argentina todavía no está claro. De momento, el Gobierno español, reunido en gabinete de crisis, ha anunciado a través de los ministros de Exteriores y de Industria que en los próximos días tomará "medidas claras y contundentes". De entrada, se va a pedir una toma de posición por parte de la UE.

España es el principal inversor extranjero en Argentina, con unos 18.000 millones de euros. Hay una docena de grandes empresas españolas en Argentina. En total, más de 400 empresas españolas operan en el país latinoamericano.
En el caso de Repsol, la mitad de su explotación energética la realizaba en Argentina y de ahí provenía un tercio de su beneficio. La compañía energética ya ha anunciado acciones legales contra esta expropiación.

La privatización de YPF, durante muchos años joya de la corona del sector energético argentino, se llevó a cabo en 1999 bajo la presidencia de Carlos Menem. Un presidente que tuvo una acusada tendencia a privatizar empresas estatales. En este caso, YPF se encontraba en una situación económica no muy boyante y, además, eran los tiempos del Consenso de Whasington, por el que el FMI y el Banco Mundial marcaron una claras directrices a Argentina que Menem siguió sin oponerse. Un sector de la clase política argentina, aunque en ese momento votaran a favor de la privatización de YPF, siempre soñaron con recuperar la empresa para el Estado argentino. Entre ellos, el malogrado expresidente Néstor Kirchner (entonces gobernador de la provincia de Santa Cruz) y su esposa, la actual presidenta Cristina Fernández, en aquellos tiempos senadora.

sábado, 14 de abril de 2012

Primer foro empresarial en Latinoamérica

Más de 700 empresarios se han dado cita en Cartagena de Indias (Colombia) en el primer foro empresarial de América Latina. En el marco de la VI Cumbre de las Américas, esta reunión económica viene a demostrar la fortaleza que Latinoamérica ha conseguido imprimir a sus economías en los últimmos años (con Brasil a la cabeza: ya es la sexta potencia económica del planeta).

La región recibe el 32% de la inversión global, acapara el 16% del comercio mundial y ha disfrutado de un promedio de crecimiento medio de un 4,9% entre 2003 y 2008. Algo que hace 20 años nadie hubiera podido augurar. Reformas estructurales, potentes incentivos para atraer la inversión y, muy importante, la venta de materias primas a la gran potencia que es China a unos precios muy elevados, han conseguido situar a Latinoamérica como uno de los motores de crecimiento mundial.

Varias 'pegas' sin embargo en el horizonte. La más flagrante sigue siendo la enorme desigualdad entre la población, con unos índices de pobreza insostenibles. La brecha entre ricos y pobres sigue siendo muy alta. Se calcula que en Latinoamérica existen unos 177 millones de pobres.
Dos peligros más acechan al futuro crecimiento de la zona: la violencia y el narcotráfico. Latinoamérica acumula uno de los índices de violencia más altos del mundo. Generalmente, esta violencia se vincula al tráfico de drogas. Precisamente la despenalización de las drogas como posible solución es uno de los puntos fuertes de esta VI Cumbre de las Américas.

También es preocupante para el futuro de la región el devenir económico de las dos súper potencias: China y los Estados Unidos. Y las tentativas de nacionalismo económico que últimamente están siendo protagonistas en la zona, con el amago de privatización de YPF (filial de Repsol) por parte del Gobierno Argentino.

viernes, 30 de marzo de 2012

YPF descubre crudo en Mendoza...y Cristina Fernández quiere comprar el 33% de la compañía

YPF ha realizado un importante descubrimiento de crudo en la provincia argentina de Mendoza, en la Formación Vaca Muerta, según ha informado la compañía controlada por la petrolera española Repsol y ha publicado Europa Press. En concreto, el hallazgo aportaría en conjunto más de 750 barriles de petróleo por día.
El descubrimiento llega en un momento de especial tensión entre algunos estados argentinos y la compañía YPF, filial de la española Repsol. Los gobernadores de varios estados, así como de forma velada, la propia presidenta argentina, Cristina Fernández, acusan a Repsol y a YPF de no realizar las inversiones comprometidas y de no extraer todo el crudo que les permitirían los yacimientos que están expropiando.
De hecho, parece que el Gobierno argentino se estaría planteando comprar el 33% de las acciones de YPF. Según el periódico "El Cronista", de esta manera el Gobierno argentino dispondría de cuatro consejeros y se haría con el poder para ejercer la "acción de oro", lo que le permitiría tener un asiento más en el órgano rector de la compañía y tener mucha más influencia en la toma de decisiones de la filial de Repsol. Aún así, Repsol mantendría, al menos, el 50% de su filial. En estos momentos, Repsol ostenta el 57% de YPF.
Siempre según "El Cronista",  el Estado argentino adquiriría así esta participación por unos 18.718 millones de pesos (unos 3.222 millones de euros), poco más de un tercio de los 56.440 millones de pesos (unos 9.714 millones de euros) del valor en Bolsa de ayer de la petrolera.
Las acciones de YPF en la Bolsa argentina han repuntado ostensiblemente.

viernes, 16 de marzo de 2012

Tribuna de Opinión

En América Latina el sol que más calienta sale por Oriente
Carlos Malamud
Investigador Principal Área de América Latina del Real Instituto ElCano


Brasil ya es la sexta economía del mundo. Su proyección exterior la confirma la organización del campeonato mundial de fútbol (2014) y los juegos olímpicos (2016). Por eso, ha dejado de ser el país del futuro para ser el país del presente. Si sumamos otras naciones de América Latina, como Argentina, Chile, Colombia, Paraguay, Perú, República Dominicana o Uruguay, con espectaculares tasas de crecimiento; o México, cuyo economía creció más que la brasileña en 2011 y lo volverá a hacer en 2012, el resultado es espectacular.
El optimismo reinante en toda la región ha llevado a hablar de "la década de América Latina". Según las estimaciones iniciales del Banco Mundial en 2012, América Latina seguirá creciendo a buen ritmo. Este año se espera un incremento del 3,6%, casi medio punto menos que en 2011. Todos los países crecerán más del 2% y podrán seguir creando empleo y luchando contra la pobreza, como en el pasado reciente. Sus tasas de crecimiento superan la media mundial, aunque son inferiores a los países asiáticos emergentes. En 2013 se verá una nueva aceleración, del 4,2%. Pero, la incertidumbre internacional recomienda prudencia en el medio plazo. En 2012 no se repetirán el crecimiento de 2010 (7,5% en Brasil, 9,2 en Argentina, o 15,3 en Paraguay), aunque no parece probable que ningún país entre en recesión.
El crecimiento reciente fue acompañado por políticas fiscales rigurosas, orden en los sistemas financieros, control de la inflación, incremento de las reservas de divisas, reducción del endeudamiento y puesta en marcha de políticas anticíclicas. El panorama se completa con un imparable proceso de creación de clases medias, impulsoras del aumento del consumo y del mercado interno. Pero la buena salud económica no evita los riesgos. La desaceleración de la economía mundial, especialmente China, puede afectar el precio de las materias primas. América del Sur es la región más vulnerable del mundo emergente, al basar buena parte de su crecimiento en la exportación de commodities.
Generalizar sobre América Latina es difícil y se necesita desagregar por países, mucho más con la creciente fragmentación política regional. Un déficit notable, sobre el cual llaman la atención algunos organismos financieros multilaterales (CAF, BID, etc.) son las infraestructuras. Su rezago tiene importantes costes económicos y sus efectos resaltan el peso de las fronteras como divisorio.
Las diferencias nacionales las conocen los inversores españoles. El riesgo cambia según los casos y la decisión de invertir depende de la oportunidad y rentabilidad y de la coyuntura económica, política y social y  la seguridad jurídica, como muestra el destino de la inversión española y su evolución. Argentina es un caso paradigmático. Tras la crisis de 2001 y las políticas posteriores perdió su atractivo. Mientras, Brasil y México se consolidaban como destinos preferentes de la IED, otros países, Chile, Colombia o Perú, ganaban peso. Las cifras también hablan de una realidad más compleja y de dos zonas diferentes: América del Sur y sus países productores de materias primas (que encontraron en los mercados asiáticos la clave de su continuado crecimiento) y México, América Central y el Caribe, más ligados a EEUU y a la producción de manufacturas.  
Tanto si se mira a América Latina desde Europa, y más desde España, como si se atiende la evolución de las últimas décadas, la región está en una situación envidiable. A esto se suma la pervivencia de sistemas democráticos que han eliminado las turbulencias del pasado. De ahí, la tendencia a mirar al otro lado del Atlántico en busca de oportunidades. Oportunidades para invertir, para las PYME, en la búsqueda de nuevos mercados para una producción que no encuentra salida en el mercado interior. Todo eso está ahí, pero para lanzarse a la aventura de los mercados americanos hay que conocer el terreno y ser prudentes. Hay diferencias culturales y de comunicación importantes. Parafraseando a Bernard Shaw, podríamos decir que el español es la lengua común que nos separa, pero que pese a ello tiene un potencial económico que no se termina de aprovechar totalmente.
"Latinoamérica debe añadir valor a sus procesos productivos"
Entrevista con Heraldo Muñoz, director regional para América Latina y Caribe del PNUD


N.Ribas / Madrid
Es uno de los pesos pesados de la política, el desarrollo y la cooperación mundial. El chileno Heraldo Muñoz (Santiago, 1948) ha pasado por numerosas responsabilidades políticas tanto dentro de su país como en el extranjero, primero como embajador y más tarde en Naciones Unidas. En 2010, reemplazó a Rebeca Grynspan como subsecretario general del PNUD (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo) y director regional para América Latina y Caribe.
En esta entrevista en exclusiva para Dossier Empresarial, Muñoz desgrana lo que a su entender marcará la diferencia en Latinoamérica: que las distintas economías sepan aprovechar su buen momento y las sinergias comerciales con las empresas europeas para incorporar know how a su sistema productivo y, así, ganar en valor añadido.

¿Cómo se vive desde Latinoamérica la crisis que azota a Europa y a los EE.UU? Hay una especie de cambio de papeles en los últimos cuatro años...
Se ve con mucha preocupación, de manera particular desde el descalabro de Grecia, pero yo diría que hay una especial inquietud respecto a España e Italia, y en general hacia la Eurozona. Es verdad que los roles se han intercambiado. América Latina se ha recuperado de la crisis y las tasas de crecimiento el año pasado fueron muy robustas en países como Argentina, Perú y Chile.

Se han hecho los deberes...
Sí, hay un cierto optimismo en la región, por este crecimiento, por el boom de las commodities, y porque los países han puesto su casa en orden: han manejado bien la economía y algunos han aplicado medidas contracíclicas que les han permitido expandir el gasto fiscal en un momento de estrechez. Pero no vivimos en un mundo aislado. Y por ejemplo las noticias que están llegando de China, sobre una disminución considerable de la tasa de crecimiento, puede afectar de una manera significativa.

Realmente, ¿las empresas latinoamericanas están ya más pendientes de China que de Europa?
Realmente, para los países de América del Sur es mucho más preocupante la situación que pueda vivir China. El boom de las materias primas ha beneficiado enormemente a la economía de sus países. De manera que si baja el crecimiento en China, uno de los principales importadores, es un signo de alarma. Sin embargo, yo creo que ahora los países latinoamericanos han actuado de manera mucho más cautelosa, preventiva, que en el pasado.
Y, por otro lado, los países latinoamericanos y sus empresas no están esperando a la recuperación de Europa, están buscando las oportunidades donde se encuentran. Así, las empresas brasileñas, peruanas, chilenas… están invirtiendo en otros países de América Latina, en EE.UU., en Asia... Y eso es un signo positivo.

Este crecimiento sostenido, ¿en qué modificará la estructura económica y social de Latinoamérica?
Existen dos preocupaciones al respecto. No está claro si América Latina va a aprovechar este crecimiento económico para una rearticulación productiva, en el sentido de agregar más valor a sus exportaciones de modo de cambiar la dependencia tan marcada de las materias primas. Aunque en la exportación de commodities hay agregación de tecnología. No es que ésta sea como los años '60. Ahora, por ejemplo, la industria frutícola chilena tiene una cadena de implementación de tecnología desde la exportación en frío, el embalaje medioambientalmente responsable… Pero de todas maneras, no está claro si se va a aprovechar esta oportunidad.

Imagino que las inversiones europeas en general y españolas en particular podrían ayudar a esta agregación de tecnología que usted reclama...
Efectivamente. Lo interesante es de qué manera se pueden aprovechar las sinergias que crean estas inversiones, de manera que los países latinoamericanos puedan aprovechar los recursos humanos y el know how de las empresas europeas que invierten en América Latina. A mi juicio deberían haber políticas claras de los gobiernos para maximizar los usos del conocimiento en el proceso productivo. Y eso requiere tiempo, requiere esfuerzo, requiere inversión. Y hasta ahora, en Latinoamérica la inversión en tecnología es bajísima. Hay muy pocas universidades latinoamericanas que estén entre las cien mejores del mundo. Hace falta inversión, una mejor conexión entre universidad y empresa. En casi todos los países latinoamericanos la inversión en ciencia y tecnología es muy baja.

¿Es un sector a explorar por parte de las empresas españolas?
Por supuesto. Es un campo a explorar totalmente.

Y quizás es una actividad más asequible para las pymes españolas y europeas que quieran invertir en América Latina...
Este es un muy buen tema, de hecho la próxima Cumbre Iberoamericana va a tener un componente importante respecto a pymes. Cómo la experiencia de las pymes en Europa puede ser interesante para América Latina y viceversa. Y ahí hay un intercambio interesante porque las pymes son las que absorben más mano de obra. Hay que darle campo al emprendimiento y qué mejor que el estímulo a las pymes.

¿Y la segunda preocupación respecto a Latinoamérica?
La enorme desigualdad existente, que todavía es un lastre. Es la región más desigual del mundo medida por el coeficiente Gini. Y debe atacarse a través de, por ejemplo, una reforma tributaria que maximice el pago, evite la evasión y permita gastar mejor. Y






ENTREVISTA CON HERALDO MUÑOZ

"Latinoamérica debe añadir valor a sus procesos productivos"
Entrevista con Heraldo Muñoz, director regional para América Latina y Caribe del PNUD

N.R. / Madrid
Es uno de los pesos pesados de la política, el desarrollo y la cooperación mundial. El chileno Heraldo Muñoz (Santiago, 1948) ha pasado por numerosas responsabilidades políticas tanto dentro de su país como en el extranjero, primero como embajador y más tarde en Naciones Unidas. En 2010, reemplazó a Rebeca Grynspan como subsecretario general del PNUD (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo) y director regional para América Latina y Caribe.
En esta entrevista en exclusiva para Dossier Empresarial, Muñoz desgrana lo que a su entender marcará la diferencia en Latinoamérica: que las distintas economías sepan aprovechar su buen momento y las sinergias comerciales con las empresas europeas para incorporar know how a su sistema productivo y, así, ganar en valor añadido.

¿Cómo se vive desde Latinoamérica la crisis que azota a Europa y a los EE.UU? Hay una especie de cambio de papeles en los últimos cuatro años...
Se ve con mucha preocupación, de manera particular desde el descalabro de Grecia, pero yo diría que hay una especial inquietud respecto a España e Italia, y en general hacia la Eurozona. Es verdad que los roles se han intercambiado. América Latina se ha recuperado de la crisis y las tasas de crecimiento el año pasado fueron muy robustas en países como Argentina, Perú y Chile.

Se han hecho los deberes...
Sí, hay un cierto optimismo en la región, por este crecimiento, por el boom de las commodities, y porque los países han puesto su casa en orden: han manejado bien la economía y algunos han aplicado medidas contracíclicas que les han permitido expandir el gasto fiscal en un momento de estrechez. Pero no vivimos en un mundo aislado. Y por ejemplo las noticias que están llegando de China, sobre una disminución considerable de la tasa de crecimiento, puede afectar de una manera significativa.

Realmente, ¿las empresas latinoamericanas están ya más pendientes de China que de Europa?
Realmente, para los países de América del Sur es mucho más preo-cupante la situación que pueda vivir China. El boom de las materias primas ha beneficiado enormemente a la economía de sus países. De manera que si baja el crecimiento en China, uno de los principales importadores, es un signo de alarma. Sin embargo, yo creo que ahora los países latinoamericanos han actuado de manera mucho más cautelosa, preventiva, que en el pasado.
Y, por otro lado, los países latinoamericanos y sus empresas no están esperando a la recuperación de Europa, están buscando las oportunidades donde se encuentran. Así, las empresas brasileñas, peruanas, chilenas… están invirtiendo en otros países de América Latina, en EE.UU., en Asia... Y eso es un signo positivo.

Este crecimiento sostenido, ¿en qué modificará la estructura económica y social de latinoamérica?
Existen dos preocupaciones al respecto. No está claro si América Latina va a aprovechar este crecimiento económico para una rearticulación productiva, en el sentido de agregar más valor a sus exportaciones de modo de cambiar la dependencia tan marcada de las materias primas. Aunque en la exportación de commodities hay agregación de tecnología. No es que ésta sea como los años '60. Ahora, por ejemplo, la industria frutícola chilena tiene una cadena de implementación de tecnología desde la exportación en frío, el embalaje medioambientalmente responsable… Pero de todas maneras, no está claro si se va a aprovechar esta oportunidad.



*Lee el resto de la entrevista en las páginas de Dossier Empresarial

Nace Dossier Eurolatam

Bienvenidos al nuevo blog de DOSSIER EMPRESARIAL dedicado a la información y el anáilisis de las relaciones comerciales entre la UE y Latinoamérica. Esta será la ventana digital de la nueva sección mensual que DOSSIER EMPRESARIAL ha empezado a publicar este viernes 16 de marzo. A partir de hoy, el tercer viernes de cada mes encontrarás entrevistas, análisis, opinión y agenda en las páginas de DOSSIER.

Este blog nace con la ilusión de crear una comunidad al entorno de nuestra nueva sección. Está a punto para que todos los apasionados de las relaciones económicas y empresariales entre Latinoamérica y la Unión Europea, pero sobretodo entre América Latina y España, comenten, critiquen, contrainformen y opinen a partir de la información que cada mes podrás encontrar en el quiosco, en nuestra web y en twiter.

Empezamos.